Pues vuelvo a las andadas con el último encargo que he tenido, a ver si así no pierdo el ritmo y publico más a menudo 🙂 Y la temática no podía ser más musical! Cuando el cumpleañero es percusionista, la tarta tiene que ser muy… bada dum tsss!!
Como ya habéis visto: dos tambores, un platillo y las baquetas (corregidme si técnicamente se llama algo de otra manera).
El piso de abajo es el comestible, relleno de ganache de chocolate con leche. El piso de arriba es un dummie forrado de fondant, las baquetas son grissinis forrados también con fondant y el platillo aunque la idea era hacerlo comestible, no me fiaba de que llegara intacto, así que hice una base de cartón y lo forré… y de ese fondant hablaré más abajo despúes de un par de fotos más:
Hablemos del fondant dorado, para hacer detalles dorados tengo una pintura comestible dorada, que se pinta con un pincel. Pero como tenía que hacer una figura muy plana se me ocurrió la genial idea de comprar fondant oro y ya de paso plata para los tambores. Las pasadas navidades ví que Kelmy había sacado a la venta, tanto oro como plata, y me dije: «Ésta es la ocasión de probarlo» Pues mala idea. El fondant oro tiene más de ocre que de dorado, echándole imaginación puede parecer oro viejo, pero claro para unos platillos de batería no cuela. Así que al final tocó pintarlo, menos mal que tenía la pintura…
Por suerte el fondant plateado está un poco más logrado, sí que tiene más toques metálicos (aunque buena parte se queda en las manos o en la superficie donde alises el fondant…) pero bueno, como color plata no tenía pintura, se quedó tal cual y podéis apreciar el resultado.
Y ahora diréis, «Vale no es como tú pensabas pero tampoco es para ponerse así…» Pero cuando el precio por kilo de fondant pasa de unos 6-7 euros a unos 30 eurazos… Sí dice que es fondant oro, debería ser dorado. Y a mí no me lo pareció. Ea, ya lo he dicho 🙂
Después de mi queja fondantiana, llega la vista cenital, que después de la que monto para fotografiarla (soy bajita y me cuesta pillar el ángulo si encaramarme a algún lado), la pongo sí o sí:
Una vez vista la tarta desde todas las perspectivas…. al final no se quedó así 🙂 Resulta que le regalaron unos clicks personalizados muy percusionistas y los plantaron en la tarta, así que el resultado final de la tarta fue este:
Molan eh? Los clicks personalizados son obra de clicknroll y la verdad es que no podían quedar mejor 🙂
Y ¿qué nos falta? El corte!! Sí, sí, vuelvo con tooodo el arsenal y también tengo foto del corte, que alegría que alboroto!! Bizcocho de vainilla y ganache de chocolate con leche. Rico, rico!
Me han dicho que la tarta gustó mucho y que no quedaron ni las migas, así que me he marcado un solo de mesa para celebrarlo 😛
Informó la repostera más dicharachera 😉
La repostera más dicharachera 
Perfecto como siempre