El pasado 27 de marzo fue el cumpleaños de mi hermano mayor y nos invitó a una merida-cena dulce-salada en su casa. De la tarta me encargaba yo 😀
El año pasado ya le hice su tarta favorita (la de crema de limón y merengue) y este año, pensé en repetir pero me parecia poco original así que la versioné un poquito… Esto en terminología inglesa es mas fácil explicarlo diciendo que pasé de un «pie» a un «layer cake», pero bueno, eso viene a decir que cogí la original (base de bizcocho sable breton, crema de limón y mucho merengue encima) y la cambié por tres capas de bizcocho normal con mousse de limón entre medias y cubierto todo con merengue italiano.
El resultado:
El merengue italiano quemado por mi madre que es la encargada del soplete desde siempre 😀
La mousse sobrante la puse en unos tarros de cristal para comer con cuchara. Rico, rico y refrescante! 
Como reflexión sobre esta reinterpretación tarteril… La tarta en sí estaba muy rica. Fresquita, con un toque ácido en la mousse, jugosa… Peeero claro, comparando con la versión original… tenía poco merengue. Y a los amantes del merengue lo notaron 😀 Igual sustituyendo el último piso de bizcocho por mogollón de merengue…
Y para que la veáis por dentro… foto del corte!
De paso aproveché que mi hermano es fan de Star Wars para probar unos cortadores nuevos starwarianos:
Darth Vader (mola), Chewbacca (mola), Yoda (no mola tanto) y C3PO que el marcador del cortador va mal por no decir fatal y el resultado es tristón (pero molaría). El tamaño de las galletas son pequeñicas (soy fan de los galletones qué le vamos a hacer) pero están guays 😀
Y estos fueron los dulces del cumple de mi hermano. El año que viene más y mejor!!
Informó la repostera más dicharachera 😉
La repostera más dicharachera 